Política de Conflicto de Intereses

Es obligatorio que los autores declaren la existencia o no de conflictos de intereses, ya que la confiabilidad del proceso de revisión por pares y la credibilidad de los artículos publicados dependen en parte de cómo se manejan los conflictos de intereses durante la redacción, la revisión por pares y la toma de decisiones por parte de los editores. El conflicto de intereses puede ser de naturaleza personal, comercial, política, académica o financiera.

Los conflictos de intereses pueden surgir cuando los autores, evaluadores o editores tienen intereses que, aparentes o no, pueden influir en la preparación o evaluación de los manuscritos.

Para decidir mejor sobre un manuscrito, es necesario conocer los intereses de competencias que puedan tener los autores. El objetivo no es eliminar estos intereses; son casi inevitables. Los manuscritos no serán rechazados simplemente porque exista un conflicto de intereses.

Si no existen conflictos de intereses, basta transcribirlo y agregarlo en el campo indicado arriba de la siguiente nota: No hubo conflictos de intereses para realizar este estudio. Si los autores no están seguros de qué puede constituir un posible conflicto de intereses, deben comunicarse con la secretaría editorial de Cadernos Brasileiros de Terapia Ocupacional.

De esta manera se espera:

Autores: Al enviar un manuscrito, son responsables de reconocer y revelar conflictos financieros o de otro tipo que puedan haber influido en su trabajo. Deben reconocer todo apoyo financiero para el trabajo y otras conexiones financieras o personales en relación con la investigación.

Revisores: Deben revelar a los editores cualquier conflicto de intereses que pueda influir en sus opiniones sobre el manuscrito, y deben declararse no calificados para revisar manuscritos específicos si creen que hacerlo es apropiado.

Editores: Deben declarar posibles conflictos de intereses en la evaluación de manuscritos, así como actuar para evitar que conflictos de intereses que involucren a autores y evaluadores comprometan los estándares éticos en la publicación.